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miércoles, 9 de febrero de 2011

Prensa 9 febrero

Trabajo prevé que el 60% se siga jubilando antes de los 67 años


La reforma de las pensiones aprobada por el Gobierno y pactada con los agentes sociales servirá para arrastrar hacia adelante la edad real de jubilación, pero esta no alcanzará los 67 años en términos efectivos. El secretario de Estado de la Seguridad Social, Octavio Granado, avanzó ayer un cálculo de la situación a partir de 2027, cuando concluya la implantación de la reforma: entonces, un 40% de los españoles se retirarán a los 67 años; otros tantos, a los 65, y quedaría un 20% de jubilados antes de esta última edad.

Granado, que participó en una jornada sobre pensiones organizada por AFI, explicó que el gasto de las pensiones en relación al PIB pasará del actual 9% a un intervalo asumible de entre el 11,5% y el 12% a mediados de siglo, lo que "permite despejar la mayor incertidumbre que planeaba sobre la economía española". El secretario de Estado afirmó que la reforma era necesaria por motivos demográficos, pero también la justificó por la "maduración" de un sistema de pensiones público cuya definición básica data de 1963, y al que los ciudadanos adaptan sus cotizaciones "en función de su conveniencia personal".

En el mismo foro, el director del servicio de estudios del Banco de España, José Luis Malo de Molina, dio la bienvenida a la reforma, "no solo porque contribuye a garantizar la sostenibilidad futura del sistema público de pensiones, sino porque supone un ejemplo de lo que en España se puede lograr con consenso". Según afirmó, el país ya utilizó la fórmula del pacto para salir de situaciones de dureza similar en 1959 y 1977. "Hoy es más necesario que nunca avanzar con reformas acordadas, porque la pertenencia al euro impide ajustar devaluando y reduce el margen de maniobra de las políticas macroeconómicas".

Una idea similar defendió el ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, para quien la crisis ha elevado la comprensión ciudadana de las "responsabilidades" que conlleva la pertenencia al euro, lo que "hace que el momento sea favorable para las reformas". Gómez reclamó el apoyo del Partido Popular en la tramitación parlamentaria del acuerdo de pensiones, "porque no sería coherente exigir reformas y, cuando se hacen, retirarse del escenario".



El Banco de España urge eliminar la referencia del IPC en los convenios


El director del servicio de estudios del Banco de España, José Luis Malo de Molina, reclamó ayer a patronal y sindicatos que aprovechen la reforma de la negociación colectiva para acabar con la revalorización salarial en función del IPC. El ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, admitió la importancia de la productividad, pero advirtió contra el riesgo de pérdida de poder adquisitivo que supondría la eliminación total del IPC.

El debate se aviva. La semana pasada, la canciller alemana, Angela Merkel, reclamó al Gobierno que desvincule los incrementos salariales de la inflación. Un día después, el Banco de España advertía en su boletín sobre la necesidad de controlar las remuneraciones, a la vista de que algunos convenios recientes están incorporando el repunte inflacionista y generando riesgos de retroalimentación. No en vano, los renovados en enero registraron avances del 3%, frente al 1,3% de diciembre.

Pero el organismo regulador expuso ayer su visión de forma aún más clara. El director de su servicio de estudios, José Luis Malo de Molina, afirmó que "es necesario cambiar la indización de los salarios según la inflación", una postura que, según recordó, viene defendiendo desde hace tres décadas. A su juicio, esa situación, junto a la rigidez de la negociación colectiva, "introducen una inercia que puede dar lugar a fenómenos como los de 2009, cuando el PIB caía un 4% y los salarios crecían un 4%".

Malo de Molina, que participó en una jornada sobre la reforma de las pensiones organizada por AFI, afirmó que la revalorización ligada al IPC previsto "es un residuo" y un "obstáculo para la recuperación". Por eso instó a los agentes sociales a acabar con ella cuanto antes (el plazo para la nueva negociación colectiva termina dentro de un mes), para evitar que en futuras crisis el ajuste vuelva a realizarse a través del empleo.

Negociación en la empresa

La visión de Merkel y el Banco de España, que pretenden ceñir las subidas salariales a los avances de la productividad, no es compartida por el Gobierno. En el mismo foro, el ministro de Trabajo e Inmigración, Valeriano Gómez, recordó que la productividad ya forma parte de la negociación colectiva, pero excluir la inflación prevista de las subidas acordadas "supondría desvincular los salarios del poder adquisitivo y generaría cierta resistencia a elevarlos".

Según el ministro, el mejor lugar para acordar una mayor incidencia de la productividad es la negociación colectiva a nivel de empresa, "un ámbito que deberá tener más importancia después de la reforma". No obstante, Gómez advirtió de que la propuesta alemana de limitar los avances a la inflación "puede generar sorpresas en momentos de crisis como los más recientes, cuando la productividad aparente ha crecido mucho a causa de la gran pérdida de empleos".



El Supremo rechaza que se revisen a la baja los salarios si cae el IPC


El Tribunal Supremo (TS) ha reiterado que las empresas no pueden revisar a la baja una subida salarial pactada por el sector porque la inflación fue menor de la prevista.

En una sentencia del pasado 14 de diciembre que se conoció ayer, cuando el debate sobre la vinculación de las retribuciones a la inflación se ha generalizado, rechaza la pretensión de la Federación Empresarial de Autotransporte de Tarragona (FEAT) de descontar la diferencia entre el IPC previsto y el real para 2009.

El fallo da la razón a UGT y CCOO en un conflicto colectivo contra FEAT por considerar que esta patronal quiso aplicar una revisión a la baja en la evolución de los salarios porque el IPC registrado en Cataluña en 2008 fue inferior a la subida salarial pactada en el convenio.

El TS recuerda que en la negociación colectiva hay una “larga, reiterada y uniforme práctica” de revisar los salarios al alza con arreglo al IPC. Así lo reconoció la Audiencia Nacional (ver EXPANSIÓN del 15/6/2009) en un recurso de CCOO y UGT contra Sogecable. Y lo ratificó el Supremo en febrero de 2010.

Sin embargo, añade el TS, “nunca se pactó revisión a la baja, porque nunca, desde que se implantó la negociación colectiva”, la inflación real a fin de año había sido inferior a la prevista, por lo que para hacerlo, tendría que haber constado “de manera expresa” en el convenio.

En el citado convenio, se había acordado una subida salarial según el IPC catalán de 2008 más una décima, así como un aumento lineal de nueve euros, y hasta conocerse el dato oficial de inflación se había decidido un incremento salarial del 3%.

Voluntad de las partes

Como el IPC de 2008 fue del 1,6 %, FEAT pretendía que las tablas salariales de 2009 se revisasen a la baja, que se redujese en 1,3 puntos la subida salarial –al restar a los tres puntos de subida inicial los 1,6 puntos de inflación más la décima–.

El Supremo declara que dicha revisión no consta en el acuerdo y no se puede aplicar, y pide que en 2009 se aplique la subida acordada.

José Luis Aymat, presidente de FEAT, lamentó ayer el fallo del TS, ya que, a su juicio, “la voluntad de las partes que refleja el convenio avalaba la revisión, como entendió el TSJ de Cataluña”.



El Ibex 35 ronda de nuevo los 11.000 puntos, pero carece de apoyos para el ataque


La agenda del día venía escasa de citas relevantes, pero las que hubo bastaron para mover a los mercados.

Las referencias de la jornada fueron la subida de tipos en China, la producción industrial alemana y la confianza de las pequeñas empresas en Estados Unidos. La subasta de deuda en Grecia, la confianza empresarial francesa, los precios inmobiliarios británicos y los resultados corporativos de UBS y Arcelor Mittal completaron las claves de la jornada. El Ibex 35 terminó en los 10.965,1 puntos, un 0,39% al alza, pero no tocó siquiera los 11.000 puntos.

En realidad, la tercera subida de los tipos de interés en China desde el pasado mes de octubre fue una sorpresa, pues se preveía un movimiento así desde Beijing, pero no tenía fecha. Al mercado la preocupó lo justo, pues parece que lo tenía descontado en parte. La subasta de deuda griega tenía por objetivo emitir 300 millones de euros en letras a 6 meses y terminó colocando 390 millones al 4,64%. Buen resultado, que el mercado obvió también, pues la prima de riesgo española se fue por encima de los 200 puntos básicos con respecto a la alemana. Finalmente, al cierre, la prima es de 202 puntos básicos, con el bund ofreciendo una rentabilidad del 3,24%.

En la agenda macro, lo más relevante, por inesperado fue la caída del 1,5% mensual en la producción industrial de Alemania en diciembre, aunque se vio compensada por la balanza comercial de Francia, que arrojó un déficit de 5.100 millones de euros en diciembre y por un repunte de los precios inmobiliarios británicos en enero (-31% frente al -38%).

Por otro lado, en EEUU la Federación Nacional de Negocios Independientes (NFIB, por sus siglas en inglés) subió hasta los 94,1 en enero desde los 92,6 de diciembre, su nivel más alto desde diciembre de 2007, y frente a una previsión de 94 puntos.

La paridad euro/dólar se sitúa, tras conocerse todos estos datos, en las 1,367 unidades, un 0,65% a favor de la moneda única, en tanto que el oro al contado cerró con un precio de 1.363,50 dólares, una subida del 1,18%.

Mientras, por el lado de las empresas, el banco suizo UBS anunció unas previsiones débiles para su negocio, pero apuntó buenas perspectivas desde el negocio de patrimonios,lo que permitió la subida de sus títulos. Mientras, la siderúrgica indio-europea ArcelorMittal batió las previsiones de beneficios para el cuarto trimestre.

Los grandes valores del mercado continuo siguen inactivos y eso imposibilita el ataque serio a los 11.000 puntos. Se mantiene una fase de distribución que lleva el dinero a otros valores, pero que se deja notar en los bajos volúmenes de contratación. Hoy, de nuevo, no se superaron los 2.100 millones de euros. Las mayores subidas del Ibex 35 fueron para Abengoa, más de tres puntos porcentuales, y FCC, Arcelor Mittal e Inditex, por encima de los dos puntos porcentuales. Sacyr, con dos puntos de cáida, y Técnicas Reunidas, con poco más de un punto porcentual, fueron los más vendidos.

Por último, en lo que respecta al petróleo, el contrato de futuros sobre el brent con próximo vencimiento tiene un precio de 99,88 dólares, un 0,6% al alza.

Mañana no tendremos datos importantes en EEUU, pero conoceremos los datos semanales de hipotecas MBA y las reservas de petróleo, gasolina y refinados. En Europa, será la balanza comercial de diciembre en Alemania lo que capte nuestra atención con la evolución de las exportaciones e importaciones, junto a la balanza comercial británica de ese mismo mes. En China, será importante ver el PMI de servicios del mes de enero que podría mostrar deterioro al igual que ocurriese con el PMI manufacturero afectado por las medidas del Gobierno chino para frenar el ritmo de crecimiento de su economía.

Por el lado corporativo, publican resultados Cisco Systems, Metlife, Equifax, Polo Ralph Lauren, Reckit Benckiser Group, Air France-KLM, Sanofi-Aventis y Coca-Cola (EEUU).



Wall Street cierra con avance del 0,59% en el Dow Jones de Industriales


La Bolsa de Nueva York cerró hoy con un ascenso del 0,59% en su principal indicador, el Dow Jones de Industriales, impulsado por el decidido ascenso de la cadena de comida rápida McDonald's y en un día marcado por la subida de los tipos de interés en China.

Según datos provisionales al cierre, ese índice, que agrupa a treinta de las mayores empresas cotizadas estadounidenses, sumó 71,52 puntos para acabar en 12.233,15 unidades, el selectivo S&P 500 ganó el 0,42% y el índice compuesto del mercado Nasdaq avanzó el 0,47%.



La subida de tipos en China pasa factura al Nikkei


La subida de 25 puntos básicos que decretó ayer el Banco Central de China para los tipos de interés ha pasado factura en Asia al Nikkei japonés, que ha terminado esta madrugada con una bajada del 0,17%. A media sesión, el Hang Seng de Hong Kong pierde algo más del 1%.

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